Por Miguel Ángel Rodríguez Mackay
Excanciller de Perú e Internacionalista
En los últimos días la atención en el mundo se encuentra en la porción asiática por la que pugnan India y Pakistán, conocida ampliamente como la región de Cachemira, puntualmente desatada por actos de violencia en ese territorio que han provocado mutuas reacciones, las que pondrían en peligro la paz en esa parte del globo. Lo voy a explicar. India y Pakistán son países vecinos en el continente asiático, el más extenso de los 5 que cuenta el planeta. En realidad, luego de la independencia de India, en 1947, la denominada India británica, terminó dividida en los dos referidos Estados. El criterio dominante en la partición fue la religión y eso explica por qué India, cuenta con más de 1450 millones de habitantes –el país más poblado del mundo–, en el que la inmensa mayoría profesa el hinduismo, y Pakistán, con más de 250 millones de habitantes, son islámicos, la religión fundada por el profeta Mahoma en el siglo VII.
Entre ambos países se encuentra la referida región de Cachemira que se disputan a morir, contando control efectivo cada uno en una proporción específica. En ese mismo marco de pugnas, surge progresivamente en el otro lado de India, finalmente, Bangladesh, que le fue arrancado a lo que se llamó Pakistán Oriental y de cuyo proceso no abordó en esta columna por un asunto de espacio.
Volviendo, la referida disputa territorial que mantienen desde 1947 para tener la soberanía total sobre Cachemira ha convertido a India y Pakistán en auténticos rivales o enemigos, manteniendo roces y conflictos periódicos, sin encontrar, penosamente, hasta la fecha una solución definitiva respecto de esta región montañosa que abarca una superficie aproximada de 222,200 km2. China, que no es parte directa del problema, también controla una porción de esta región conocida como Aksai Chin.
Por querer India y Pakistán el ciento por ciento de Cachemira el conflicto ha tenido diversos matices a lo largo de los últimos 78 años y constituye una seria amenaza para la paz en la región y el mundo. En los últimos días resultaron muertos más de 26 turistas en la Cachemira bajo control de India que no tardó en imputar a Pakistán dicho atentado al que considerarlo uno de naturaleza terrorista. La reacción de India se produjo recientemente con ataque es espacios específicos de la Cachemira bajo control paquistaní. El gobierno de Islamabad acaba de prometer una reacción a tono de venganza.
Lo que más preocupa es que ambos países tienen calidad nuclear y esa sola razón inquieta a las poblaciones en ambos países, pero también al mundo. El temperamento en esa región no es el mejor por hallarse exacerbado, no siendo el idóneo, entonces, para la paz que todos queremos. Veremos que sucede, bilateralmente, aunque los países con influencia en la determinación del poder mundial como Estados Unidos, Rusia y el Reino Unido, deberían involucrarse hasta donde sus esfuerzos lo permitan, para evitar que la escalada de la tensión de los últimos días, pudiera dar paso a un escenario inesperado, reavivando un foco conflictual en el mundo.
(*) Excanciller del Perú e Internacionalista